18 de septiembre de 2014

Generosidad de calles.

Hoy os traigo una de esas placas que pasan inadvertidas pero que desde luego son curiosas.




Esta puerta está en la calle Nicolás Antonio, casi entrando en la plaza de Santa Cruz, que atraviesa transversalmente los Jardines de Murillo y el paseo de Catalina de Rivera. Los Jardines de Murillo fueron cedidos en dos etapas a la ciudad. Antes eran parte de la huerta privada del Alcázar, pero fue cedido en primer lugar el Paseo de Catalina de Rivera para ayudar la comunicación en los nuevos barrios a extra muros que se crearon a finales del siglo XIX y la segunda cesión se hizo en 1911, terminando el espacio que hoy conocemos como Jardines de Murillo. Se creó un espacio público que se perfeccionó tal y como lo conocemos para la Exposición Iberoamericana del 29.

A raíz de esta cesión, según vemos en la puerta, el generoso propietario de esta casa que se encuentra en las murallas de la ciudad, cede parte de la misma a la ciudad para crear una vía de acceso al nuevo parque desde el barrio de Santa Cruz.

9 de septiembre de 2014

La Buhaira.

Hoy vengo a hablaros de uno de mis rincones favoritos de Sevilla: la Buhaira.



(foto por cortesía de Manuel Santana)

En concreto, hoy vengo a hablaros del palacio almohade y lo que queda de sus jardines. Para centrarnos en su historia, fue construido por el califa Abu Ya Qub Yusuf que construyó la Mezquita Mayor -cuyo espacio exacto ocupa hoy la Catedral-, la Giralda y los Alcázares (como veis, debemos muchísimo a este califa bien desconocido para la ciudad, puede que su nombre tenga mucha culpa). En su interior se encuentra un patio interior bastante grande, del que parte el resto de dependencias. Actualmente es un centro cívico.




(foto por cortesía de Manuel Santana)


(foto por cortesía de Manuel Santana)

Como podemos ver, el palacio está claramente inspirado en nuestra querida Giralda, manteniendo el estilo de ladrillo visto y decoración geométrica con los mismos. Sus territorios ocupan los actuales jardines y la zona llamada Huerta del Rey.




Recibía el agua de los Caños de Carmona,con un exquisito sistema árabe que regaba la huerta y unos jardines que eran enormemente variados. La huerta se mantuvo hasta el siglo pasado, y los jardines se fueron perdiendo en parte con el tiempo.



(foto por cortesía de Manuel Santana)


(foto por cortesía de Manuel Santana)



Fuentes y albercas mantenían el abastecimiento necesario de agua, algo en lo que los árabes eran especialistas y a los que debemos muchísimo.

(foto por cortesía de Manuel Santana)

(foto por cortesía de Manuel Santana)

Nos queda un precioso jardín y restos de la muralla que cercaba el recinto palaciego.