Discurso de despedida en la graduación de la promoción 2012-13, por Pablo Rejano Gómez.
"No quería terminar el año sin dar unas últimas palabras como despedida de esta gran etapa que estamos cerrando.
En mi caso, entré en este instituto en 1º de Bachillerato, como otros muchos. Para mí, esto era un mundo nuevo, totalmente distinto a lo que había conocido.
Han sido 2 años muy intensos, cargados de historias y puede que no haya conocido a toda la gente que me hubiese gustado, pero sí que me llevo a grandes amigos y grandes momentos.
He aprendido que no he estudiado en un instituto cualquiera, sino en una institución histórica para Sevilla. Cuando pasee por la calle Amor de Dios en un futuro con mis hijos, podré decirles “mira, aquí estudié yo”: Podré decir que estudié donde estudió el premio nóbel Severo Ochoa o grandes figuras de la literatura nacional como Bécquer, y así, decenas de personajes ilustres y otras miles de personas que tenemos en común en el currículo de la vida el haber estudiado en el primer instituto de Sevilla.
Aquí aprendí, entre otras muchas cosas, a derivar (bueno, a intentarlo), a amar la literatura, las vicisitudes de la historia más reciente y que en economía.... bah, esto es muy fácil y no tiene mucho misterio.
He comido bocadillos de carne mechada en la cafetería, he ido con mucho miedo a los exámenes de Bolea, me he escondido en la esquina para no correr cuando estaba cansado y que Engracia no me viese, he escuchado a Antonio Carmona decir “de muy padre señor mío” y leído versos sobre el silencio en mi pizarra escritos por Pilar. Y así, miles de momentos que nombrarlos a todos me daría para cientos de discursos.
Estábamos empezando, y ya acabamos. Parece ayer cuando entrabamos todos asustados como corderitos al matadero y aferrados a los dos o tres que conocíamos de fuera hace ya dos años.
Bachillerato se ha acabado y ahora queda la temida selectividad. Mi consejo es... bah, da igual lo que os diga si total, iremos todos asustadísimos con el rabo entre las piernas y los apuntes en la mano (yo el primero) el 18 a Viapol. Pero sí que os digo una cosa: disfrutad. Disfrutad de hoy, de la oportunidad que tenemos de acabar bachillerato por la puerta grande.
Cambios, es una etapa de cambios. Nos han cambiado el escudo del encabezado de los papeles de la Junta por el logo de la Universidad de Sevilla; nos han cambiado el lugar de estudio y nos cambiarán nuestro “hábitat social”. Cambios, cambios y más cambios. Cambio a una etapa que dicen que es la más bonita de nuestra vida, la universidad. Y puede que les tengamos miedo a veces, pero ¿qué es la vida sino un cambio contínuo?.
La mayoría de los conocimientos adquiridos serán olvidados y muchos de nosotros volveremos a ser desconocidos, pero nadie nos podrá quitar “lo bailao”, lo vivido, y siempre tendremos los recuerdos de este tiempo entre estos muros; de esta etapa en el San Isidoro.